25/8/14

Los Celtas


Para adentrarnos en el mundo celta, y sobre todo, para utilizar esta cultura para nuestro relato necesitamos conocer cómo pensaban, cómo dividían el tiempo y como se comunicaban. Este artículo es esencial para aproximarnos a una Escocia e Irlanda pagana (que duraría hasta el s. XVIII con el surgimiento de la Ilustración). Una de las características de Escocia es que el culto es una combinación de elementos celtas y elementos cristianos que perduraran hasta el presente en sus tradiciones.
Los temas a tratar son:

1. Historia

2. Mujer celta y el matrimonio 

3. Mitos y leyendas 

4. Calendario y festividades

5. Culto y Simbología 

6. Ritual funerario

1. HISTORIA

La cultura Celta, recibe el nombre científico de: La Tène, y es un claro exponente de la continuidad de la tradición hallstáttica. La Tène es, además de ser la época de los celtas, el primer pueblo histórico de Europa.  

En las fuentes grecolatinas recibe el nombre de: Keltoi, naturales de la Celtia o keltike.


La civilización La Tène comienza sus primeros pasos en la primera mitad del s. V a.C. (480-459 prox.). Su ocupación geográfica se centra en: Europa Central (denominados como los celtas históricos), Norte de Italia, Oeste de Francia y las Islas Británicas (donde se mantendrán hasta después de finalizar la dominación romana) y por último la Península Ibérica (destacando Galicia).

En la actualidad son siete las naciones que conservan rasgos celtas en su cultura, destacando el habla en gaélico, festividades y supersticiones: Bretaña, Cornualles, Escocia, Gales, Irlanda y la Isla de Man.

La sociedad celta, se caracterizaba por ser: 

1. Un pueblo socialmente clasificado. La división urbana será: 
  • Centros públicos en el centro y de mayor tamaño que el resto.
  • Las casas serán todas del mismo tamaño (incluso la del líder-dirigente, quien normalmente era de edad avanzada; ya que se considera que los ancianos son los portadores de la sabiduría. En algunos casos los cargos pueden ser hereditarios, naciendo así auténticas dinastías). 
2. Es una sociedad que presenta las primeras organizaciones militares (a partir de la Edad del Bronce, las sociedades desarrollaran un sistema de defensa tanto humana como material: construcciones, armas, etc.), cuya carga recae en los varones, aunque la mujer fue instruida en el arte de la guerra. 

El poblado celta suele recibir el nombre de oppida, ya que solían situarse en lugares elevados, como: colinas y mesetas; cuya vista estratégica les permitía controlar el territorio.

3. En cuanto a su economía. Será variada según en qué parte geográfica nos situemos, pero destaca: la agricultura, la ganadería, la metalurgia y la artesanía (especialmente la orfebrería).


2. MUJER CELTA Y EL MATRIMONIO

Un estudio interesante e importante al mismo tiempo, por la cantidad de fuentes consultadas, es el estudio de Viviana E. O´Connell: escritora y directora de la publicación The Shamrock y presidente de la subcomisión de cultura de la colectividad irlandesa de la ciudad de Rosario (LEER ARTÍCULO).

En las fuentes más importantes de la antigüedad se ha mencionado el papel igualitario que la mujer celta poseía dentro de su cultura. Se hablan de mujeres guerreras y druidas.

Las mujeres guerreras cuyos nombres recogen las fuentes son: Boudicca, reina de los icenios, quién con su carro de ejes cortantes fue quien rompió las filas de la IX Legión romana. Cartimandua, la reina de los brigantes, quien apresa a Caradawc.

La mujer celta, además de presentar batalla, podía poseer propiedades que heredarían sus descendientes, no teniendo el marido ningún derecho sobre ellos. En caso de haber propiedades en común, era necesario el consentimiento de los dos cónyuges para su compra y venta.

El matrimonio celta tiene como particularidad de que podía durar toda la vida o un año y un día, período en que se definían las uniones a prueba. Tras este periodo se procedía a la unión ritual que les uniría como matrimonio “cerrado”. No obstante, existía el divorcio, lo cual nos sitúa frente a una sociedad avanzada en su tiempo.

3. MITOS Y LEYENDAS

La cultura celta es, por antonomasia, narradora de grandes historias. El pasado se convierte en relato oral contado de generación en generación y algunos de ellos han sobrevivido hasta la actualidad.

Entre sus leyendas tradicionales (AQUÍ PODÉIS LEER ALGUNASla más conocida es la del Rey Arturo (LEER AQUÍ).

Los celtas, al igual que otras culturas protohistóricas, basaron la creación del mundo a través de deidades y seres fantásticos. Los dioses celtas estaban relacionados con la tierra y los elementos. CLICK! para conocer más sobre la mitología celta ( NOTA: Las divinidades son irlandeses).


4. CALENDARIO Y FESTIVIDADES

El día celta comienza en el inicio de la noche y continúa hasta el anochecer del día siguiente. Tendrá una importancia relevante el atardecer y la aurora, ya que la actividad espiritual, la adivinación y la magia son más potentes. 

Por esta razón las festividades celtas se celebran en las “vísperas”. Ellos creían que la oscuridad de la noche era un momento de creatividad, por lo que era el periodo ideal para llevar a cabo ceremonias de cariz más espiritual. Por ello las fases de la Luna son tan importantes en el calendario celta:

Luna Nueva: es tiempo para actividades solitarias y silenciosas como reflexionar, soñar y crear. Es el momento para iniciar algo nuevo. 

 Luna Creciente: es un periodo para ser más extrovertido y tener más vitalidad hacia el exterior. Canalizar nuestra energía y poner en marcha nuestros objetivos.

 Luna Llena: es el momento ideal para tomar parte en actividades sociales y dar fiestas.

 Cuarto Menguante o Menguante: cerrar el ciclo de inicio de actividades. Fase para relajarse y renovar energías para un nuevo ciclo lunar.


CONSEJO: Buscar el calendario lunar correspondiente al año actual de nuestro presente, será de gran ayuda a la hora de situar las fases lunares, ya que el calendario no solo nos servirá para las festividades; sino también que también determinara en la siembra y el buen desarrollo del embarazo (de ahí que los meses de gestación se contasen en lunas). No en vano la Luna ha sido el emblema de la fertilidad. 
El calendario celta, además de ser lunar, está integrado en la naturaleza; con lo que cada mes corresponderá a una planta distinta.

Las actividades y festividades más mundanas se llevaban a cabo al salir el sol, y se celebran en los equinoccios de las estaciones:


Las ocho festividades solares más importantes son: 

1. Samhain 
2. Oestre u Ostara 
3. Yule 
4. Imbolc 
5. Beltane 
6. Coamhain 
7. Lughnasadh 
8. Mabon 

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Calendario estacional


5. CULTO Y SIMBOLOGÍA

Para los celtas cada parte de la naturaleza estaba en relación con el ser humano. Antes comentábamos que el calendario celta está relacionado directamente con las plantas, por ello el culto a los animales no podía ser menos; ya que forman una alianza con el hombre y les aporta sabiduría, así como señales presentes y futuras a lo largo de su vida. De ahí la importancia de la caza y de la creación de talismanes y amuletos.


Por ello los amuletos y talismanes serán de: madera (según el árbol una atribución distinta), hueso y plumas (para obtener la fuerza del animal seleccionado). Pero existe otra forma de sentirse protegido y los celtas no se quedaron atrás en esta práctica: los tatuajes corporales estaban presentes en la sociedad celta, tal como nos habla Julio César en La Guerra de las Galias y su impacto al encontrarse ante hombres pintados de azul.

De esta forma surge una amplia gama de símbolos que conectaba al hombre con la naturaleza, creando una compleja y fascinante orfebrería en la que destacarían sus fíbulas, alfileres y broches; así como en la decoración de escudos y armas.


De todas ellos, destacar el círculo. Si recordamos en el artículo anterior, las casas celtas eran de planta circular y no por casualidad. Las esquinas son los lugares donde acecha el mal y para evitar las vibraciones negativas construían en círculos.

Y hablando de construcciones, los celtas además de venerar la naturaleza también construían lugares de culto; pequeños templos sobre todo y grabados en piedra/madera en los lugares de reunión del clan. Pero se les conoce más por utilizar lugares ya construidos y que poseen una gran dosis de misterios como los: Stonehenge y los montículos del Calcolítico.


6. RITUAL FUNERARIO

El ritual funerario, también forma parte del culto; aunque en este caso al difunto. La ceremonia será distinta, según el lugar geográfico celta en que nos encontremos pero los enterramientos serán siempre de dos maneras: inhumación e incineración. Una práctica común es el entierro del difunto con los objetos que formaron parte de su vida, denominado ajuar funerario (cerámica, joyas, espadas, etc.). En el Norte de Europa, aparecerá un elemento curioso: la presencia del carro de guerra en algunos varones. Son pocos los yacimientos arqueológicos de esta modalidad en Gran Bretaña, ya que se continuó con la tradicional incineración de finales del Bronce; pero no se descarta su utilización.

 
Fuentes:



PUBLICADO EN Escribe Romántica agosto de 2012


Editado por:


 Loly P© 

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